Las temperaturas calurosas activan las hormonas y los neutrotransmisores relacionados con el placer, según los expertos.
Silvia Sanz, psicóloga y sexóloga, explicó que el calor puede ayudar a disfrutar más de las relaciones sexuales pues, por un lado, estimula la producción de oxitocina, endorfinas y serotonina que provoca un aumento en el deseo sexual y, por el otro, causa la vasodilatación de las fibras musculares, lo que lleva a que se produzca un mayor aumento del flujo sanguíneo a los genitales.
Otro efecto positivo de las altas temperaturas sobre la actividad sexual es que se libera más testosterona y estrógenos, que contribuyen a mejorar la libido y la excitación.
Fuente: De Último Minuto